Los edificios icónicos de Buenos Aires no solo destacan por su arquitectura, sino que se han convertido en inversiones exclusivas dentro del mercado inmobiliario. Propiedades como el Palacio Estrugamou, el Palacio Los Patos y el Edificio Kavanagh siguen atrayendo a compradores que buscan historia, prestigio y ubicación privilegiada.
¿Quién elige estas propiedades?
Ejecutivos, empresarios e inversores buscan estos inmuebles no solo por su valor patrimonial, sino también por la exclusividad que ofrecen. Espacios con diseño clásico y comodidades contemporáneas garantizan una experiencia única de vivienda.
Francisco Bosch, Co-Fundador de Miranda Bosch Real Estate & Art, señala: “La demanda por edificios emblemáticos sigue siendo alta porque combinan historia, elegancia y una identidad propia difícil de replicar en desarrollos modernos”.
El valor de las vistas y la amplitud
El precio en estos edificios puede partir desde USD 2.800 por metro cuadrado, aunque la exclusividad, la vista y los detalles arquitectónicos pueden elevar el valor significativamente.
En propiedades premium, también se toma en cuenta el metro cúbico para calcular precios, considerando elementos como:
- Techos altos que aportan amplitud y sensación de lujo.
- Espacios funcionales con posibilidad de entrepisos.
- Ventilación y distribución térmica mejoradas, agregando valor en proyectos exclusivos.
Costos y mantenimiento
Vivir en estos edificios implica gastos elevados, ya que su conservación requiere el mantenimiento de fachadas históricas, pisos originales y ornamentaciones únicas. Además, suelen ofrecer servicios premium como vigilancia 24/7, jardines privados y amenities de alto nivel.
Los nuevos íconos de Buenos Aires
Además de los clásicos, la ciudad sigue sumando edificios emblemáticos contemporáneos, como la Torre Alvear en Puerto Madero, un rascacielos que redefine el horizonte porteño con unidades de lujo y vistas panorámicas.
Más que una inversión, un estilo de vida
Adquirir una propiedad en un edificio emblemático no es solo una cuestión de valor inmobiliario, sino una decisión basada en el estilo de vida y el entorno. La identidad del barrio, su oferta cultural y gastronómica, y la calidad de los servicios complementan la experiencia de vivir en estos espacios únicos de Buenos Aires.