Construcción e industria concentran casi el 80% de las desvinculaciones. Comercio, agro y pesca fueron los únicos sectores con subas, aunque insuficientes para revertir la caída.
Desde la llegada de Javier Milei a la presidencia, el empleo registrado en el sector privado ha sufrido una fuerte contracción. Según datos relevados por el Centro de Economía Política Argentina (CEPA), entre diciembre de 2023 y marzo de 2025 se destruyeron 115.353 puestos de trabajo, con la construcción y la industria como las principales actividades afectadas.
El ajuste en la obra pública explica en gran parte la debacle del sector de la construcción, que perdió 61.956 empleos, lo que representa más de la mitad de todas las desvinculaciones. Por su parte, la industria manufacturera cedió 31.301 puestos, ubicándose como la segunda rama más golpeada.
Sectores en alza, pero sin compensar
Solo tres sectores mostraron creación neta de empleo en el período analizado: comercio y reparaciones, con 21.411 nuevos empleos; agricultura y ganadería, también con 21.411; y pesca, con 1.699. Sin embargo, estas alzas apenas equivalen a la mitad de los puestos perdidos en construcción e industria.
En este marco, un informe de la Secretaría de Trabajo de la Nación reveló que en abril de 2025 la tendencia positiva también comenzó a frenarse. La pesca cayó un 2,4% intermensual, y el conjunto de actividades primarias —agricultura, ganadería, caza y silvicultura— bajó un 0,7%.
Más precarización
Mientras el empleo registrado privado cae, el monotributo sigue creciendo como modalidad ocupacional principal. Según datos oficiales, ya son 2.112.759 los monotributistas activos, un aumento del 58,8% desde 2012. Aunque esta figura otorga acceso a obra social y derecho a jubilación, no garantiza derechos laborales básicos como aguinaldo, vacaciones o licencias.
Entre enero de 2012 y diciembre de 2023 —año de traspaso presidencial— el empleo formal privado había crecido en 301.000 puestos, a un promedio de 30.000 por año, incluso considerando la pandemia. La reversión de esta tendencia marca un retroceso abrupto para el mercado laboral argentino.
Productividad en alza, empleo en baja
La paradoja económica se hizo evidente a partir de agosto de 2024: la actividad económica comenzó a recuperarse, pero el empleo siguió cayendo. En noviembre de 2024 y enero de 2025, la economía creció (0,9% y 0,5% respectivamente), pero el empleo continuó en retroceso. Solo en febrero de 2025 se dio un crecimiento conjunto: +0,7% tanto en empleo como en actividad.
El mapa sectorial al cierre de marzo
Según los datos más recientes, siete de los catorce sectores económicos registraron caídas en el empleo durante marzo:
Industria manufacturera: –4.162
Construcción: –3.235
Agricultura, ganadería, caza y silvicultura: –2.088
Enseñanza: –1.185
En contraste, los rubros con mayor crecimiento fueron:
Comercio: +1.871
Hoteles y restaurantes: +1.696
Servicios comunitarios, sociales y personales: +743
El informe muestra que, aunque ciertos sectores mantienen niveles de dinamismo, la recuperación aún no logra consolidarse en términos de empleo masivo, en un contexto de ajuste, contracción del consumo y aumento de la informalidad.
