En una señal de presión creciente sobre la Casa Rosada, gobernadores de distintos espacios políticos resolvieron avanzar de manera conjunta y sin acuerdo con el Ejecutivo nacional en un proyecto de ley que propone distribuir entre las provincias y la Ciudad de Buenos Aires los fondos recaudados por el Impuesto a los Combustibles Líquidos y los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) no utilizados para emergencias.
La decisión fue adoptada este viernes en una reunión en la sede del Consejo Federal de Inversiones (CFI), tras semanas de reclamos por la caída de la recaudación y la paralización de la obra pública. El encuentro comenzó con la presencia exclusiva de los mandatarios provinciales y luego sumó a funcionarios del Gobierno nacional.
Participaron el vicejefe de Gabinete del Interior, Lisandro Catalán, y el secretario de Hacienda, Carlos Guberman, quienes permanecieron por poco más de una hora y presentaron una contrapropuesta no difundida. Tras su retiro, los gobernadores continuaron deliberando y difundieron el contenido del proyecto, que no cuenta con el aval de la Casa Rosada.
El contenido del proyecto
La iniciativa plantea:
Eliminar los fondos fiduciarios financiados con el Impuesto a los Combustibles (Ley 23.966), para que esos recursos sean reasignados directamente a las provincias, según sus propias prioridades.
Establecer que los Aportes del Tesoro Nacional (ATN) se coparticipen bajo los criterios de la Ley de Coparticipación Federal (23.548), y no queden sujetos a discrecionalidad.
Según el documento consensuado, el proyecto no compromete la sostenibilidad fiscal nacional y apunta a “construir un federalismo más justo y equitativo”.
Reacciones y contexto político
La iniciativa llega luego de que el jefe de Gabinete, Guillermo Francos, se comprometiera a estudiar una posible revisión de la distribución de los ATN y a incrementar en un 50% la coparticipación del impuesto a los combustibles. Cerca del funcionario, sin embargo, minimizaron el alcance del conflicto y señalaron que el diálogo con las provincias seguirá abierto.
El gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, expresó en redes sociales que los fondos involucrados “son imprescindibles para sostener la salud, la educación, la seguridad, la justicia, la contención social y la obra pública en nuestras jurisdicciones”.