El gobernador de Tucumán, Osvaldo Jaldo, recibió en Casa de Gobierno al ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, y a la cúpula policial para analizar el operativo desplegado durante el encuentro entre Atlético Tucumán y Rosario Central.
Agüero Gamboa detalló que el operativo comenzó en el puesto fronterizo de Las Cejas, donde los colectivos con simpatizantes visitantes fueron escoltados hacia la capital. En ese lugar se secuestraron bebidas alcohólicas, armas blancas y objetos contundentes. Los hinchas atravesaron cinco anillos de seguridad antes de ingresar al estadio, en un procedimiento que se desarrolló sin incidentes.
El ministro informó que el partido transcurrió con normalidad, con sectores separados para ambas parcialidades. No obstante, se registró un episodio aislado cuando tres colectivos se detuvieron y algunos pasajeros descendieron sin autorización, arrojando piedras contra el personal policial. La situación fue controlada en diez minutos con disparos disuasivos y los vehículos continuaron viaje. También se secuestraron pequeñas dosis de estupefacientes, con intervención de la Justicia.
El jefe de Policía, Joaquín Girvau, confirmó la aprehensión de cuatro personas por resistencia a la autoridad y una con prohibición de ingreso a estadios. Además, destacó que el operativo se realizó bajo el sistema Tribuna Segura y que la salida de los simpatizantes fue rápida y sin destrozos.
“En Tucumán no se permitirá que las hinchadas actúen fuera de la ley”, advirtió el ministro de Seguridad.
