Pareciera un aviso fuera de lo común y quizás algunos sospecharían de un ciberataque, pero Google está recomendando a sus usuarios abandonar por completo las contraseñas de Gmail. No se trata de cambiarlas o de inventar una nueva, sino de renunciar a este sistema de seguridad por completo.
En el último tiempo, tanto Google como compañías de diversa índole, bancos, plataformas de redes sociales y de comercio electrónico estuvieron alertando sobre el prolífico aumento de los casos de phishing en el mundo digital.
Se trata de una de las herramientas más utilizadas por los hackers para acceder a datos sensibles, utilizando estrategias sumamente efectivas como la suplantación de identidad. Y en estas técnicas, la primera víctima es nuestra contraseña de Gmail.
Los hackers pueden personalizar ataques para que parezcan auténticos, enviando mensajes en los que se mencionan contactos cercanos como tu empleador, colegas o comunicaciones recientes.
Así, con la confianza de que es alguien conocido, las personas entregan su información más confidencial y pronto pierden el control de sus cuentas.La importancia de proteger tu GmailGoogle destaca un aspecto sumamente relevante: nuestra contraseña de Gmail no es como cualquier otra, el correo electrónico es la clave de todo. “Si no tienes una buena contraseña para tu correo electrónico, el resto de tu vida está prácticamente al descubierto, porque todos los servicios disponibles restablecen la contraseña enviándote un correo electrónico”, dijo Graham-Cummings director de tecnología de Cloudflare, al medio Inc. “Así que, si puedo comprometer tu correo electrónico, puedo comprometer prácticamente todo lo demás que tienes”, enfatizó.
Y la compañía destaca que más conveniente que compartir tu contraseña o hacer clic en enlaces de correos electrónicos falsos, es dejar de usar contraseñas de cuenta de Gmail. Esto no significa verse desprovisto de seguridad sino cambiarla por un sistema que Google anima a usar hace años: las claves de acceso.Cambiar la contraseña por la clave de acceso“Desde la perspectiva del usuario final, una clave de acceso se asemeja a los datos biométricos de su dispositivo”, afirmó Jeff Shiner, director ejecutivo de 1Password. “Lo bueno de una clave de acceso es que, para el usuario final, nunca tiene una contraseña para ese servicio. Simplemente usa sus datos biométricos y se crea una clave de acceso. Pero, desde el punto de vista de la seguridad, es más segura que una contraseña, incluso una contraseña segura, porque no se puede suplantar la identidad”.Ante la filtración de datos, Google alienta a los usuarios de Gmail a cambiar su contraseña. De hecho, deberían cambiarla periódicamente en caso de que se vea comprometida. Pero, aún mejor, dejar de usar contraseñas.