El gobernador en uso de licencia y candidato a diputado nacional aseguró que las intimidaciones tras la detención de “Chucky” Casanova solo refuerzan la ofensiva contra el crimen organizado.
El gobernador en uso de licencia de Tucumán, Osvaldo Jaldo, respondió a las amenazas que recibió junto al jefe de Policía, Joaquín Girvau, y al jefe de la Unidad Regional Norte, Gustavo Beltrán, luego del traslado al penal de Benjamín Paz del delincuente Javier “Chucky” Casanova, un narco con amplio prontuario.
“Desde el primer día fuimos claros: vinimos a poner orden y lo estamos cumpliendo a rajatabla, porque se acabó la impunidad en Tucumán. A nosotros con amenazas no nos van a amedrentar”, afirmó en declaraciones a Canal 10.
Golpes a los “intocables”
Jaldo destacó que la política de seguridad avanza “a fondo”, con investigaciones que alcanzaron a figuras hasta ahora “intocables”. Enumeró secuestros de camionetas de alta gama, armas de guerra, drogas, dinero y propiedades. Y advirtió que el plan incluye ir tras los bienes de los delincuentes y de sus parientes “cómplices directos de las actividades criminales”.
“Antes los tucumanos se encerraban con rejas mientras los narcos paseaban. Eso se terminó. Hoy contamos con una policía profesionalizada, equipada y con tecnología para la inteligencia criminal. Tenemos a todos detectados y el Poder Judicial acompaña cada paso”, enfatizó.
Blindaje en la frontera y coordinación
El mandatario resaltó la coordinación con la Justicia y fuerzas federales en operativos como Lapacho, destinado a controlar los pasos formales y clandestinos del norte provincial. “Cuando fallan los controles en Jujuy o Salta, nosotros tenemos nuestra propia frontera”, dijo.
Seguridad en campaña
Candidato a diputado nacional por el Frente Tucumán Primero, Jaldo aseguró que las intimidaciones no alterarán su agenda proselitista rumbo al 26 de octubre. “No es la primera vez que me amenazan. Se terminó la puerta giratoria: con el nuevo Código Procesal Penal, los delincuentes quedan presos”, afirmó.
Respaldado en estadísticas nacionales, aseguró que Tucumán está entre las tres provincias que más redujeron los homicidios en 15 años. “Pregunten cuántas veces amenazaron a gobernadores anteriores. Ninguna, porque nunca se actuó con esta firmeza”, desafió.
Y cerró con un mensaje contundente: “La policía toma todo el territorio, desde la comuna más pequeña hasta los barrios de la capital. Antes lo tenía la delincuencia, hoy lo tiene el Estado. Y vamos a fondo, caiga quien caiga”.
