La próxima campaña triguera podría marcar un nuevo récord histórico en Argentina, con una producción estimada en 23 millones de toneladas, según el informe de la Guía Estratégica para el Agro (GEA) de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Este volumen igualaría el máximo alcanzado en el ciclo 2021/22 y supera con amplitud los niveles considerados normales para el cultivo.
El reporte destaca que la situación productiva es inédita en los últimos años, con un potencial que sorprende incluso a los técnicos más experimentados. “Nunca vimos a los trigos así”, expresaron productores y asesores en distintas regiones, una percepción que la GEA señala como sin precedentes en sus 16 años de seguimiento.
El rinde promedio nacional proyectado es de 35,4 quintales por hectárea, sostenido por excelentes reservas de agua en los suelos y precipitaciones excepcionales registradas durante julio y agosto. Estas lluvias, que en su momento revirtieron un panorama de sequía, hoy consolidan una expectativa de cosecha récord.
La región núcleo encabeza las proyecciones con un rendimiento base de 40 qq/ha, lo que podría representar casi una tercera parte de la producción nacional. En Entre Ríos, la proporción de lotes en condición “muy buena” duplica la del año pasado; Córdoba muestra trigos con rindes esperados de 35,5 qq/ha (muy por encima de los 23,7 del ciclo anterior), y Santa Fe se perfila para alcanzar los 38 qq/ha.
Buenos Aires, principal provincia triguera, presenta un panorama mixto: si bien podría rondar los 40 qq/ha, enfrenta severos excesos hídricos que provocaron la pérdida de unas 210.000 hectáreas, especialmente en el centro-norte provincial. En total, se calculan 403.000 hectáreas afectadas en todo el país.
El informe de la BCR señala que desde enero hasta el 8 de octubre la provincia de Buenos Aires recibió casi el doble de lluvias respecto al promedio histórico, concentradas sobre todo en otoño e invierno.
Por otra parte, el maíz temprano avanza con buenas condiciones de implantación y podría alcanzar una producción inédita de 61 millones de toneladas, mientras que la soja comenzará su siembra en los próximos días sobre 16,4 millones de hectáreas, un 7% menos que en la campaña pasada. Con un clima normal, se espera una cosecha de alrededor de 47 millones de toneladas.
